" La tecnología espacial chilena sobresale globalmente: descubre el proyecto del nanosatélite SUCHAI y cómo Chile lidera la innovación científico-tecnológica."
La primera vez que oí hablar del proyecto SUCHAI fue cuando conocí a los ingenieros Francisco Anguita y Carlos González en una cordial charla profesional, que da pie a este artículo. Ambos participaron en el desarrollo del nanosatélite SUCHAI –I ,un cubo satélite (CubeSat) pionero construido en nuestro país por ingenieros Chilenos. Aquel encuentro personal me hizo valorar que en Chile se puede llevar adelante proyectos de ciencia espacial de alto nivel. Con apenas un presupuesto inicial de unos USD 300.000 aportado por la Facultad de Ciencias Físicas y Matemática de la U, de chile, el programa espacial de la Universidad logró el hito de lanzar al espacio el primer satélite chileno en 2017. Este antecedente demuestra que, a pesar de la modesta inversión, el estado de Chile, estaríamos al debe con la tecnología y la ciencia, (0,36% del PIB) uchile.cl, nuestros científicos e ingenieros compiten al nivel de países desarrollados. Como dijo el profesor Marcos Díaz, líder del proyecto SUCHAI I, “el objetivo es posicionar a Chile como un país capaz de realizar ciencia espacial de alto nivel” y convertirse en un “actor mundial” en la industria de los pequeños Nanosat, satélitesuchile.cl.
Proyecto SUCHAI: nanosatélites Chilenos.
El programa SUCHAI (Satélite de la Universidad de
Chile para la Investigación Aeroespacial) comenzó en 2010 como un desafío
académico. Tras siete años de trabajo, el 22 de junio de 2017 se lanzó
exitosamente SUCHAI I desde la base Sriharikota de ISRO (India), marcando un
hito nacionaluchile.cl. La misión SUCHAI I demostró que en Chile hay capacidad
técnica para diseñar, integrar y probar un nanosatélite totalmente nacional.
Posteriormente, se desarrollaron las versiones SUCHAI II y III, incorporando
nuevos experimentos y femtosatélites adicionalesuchile.cluchile.cl. Esta
secuencia de lanzamientos permitió al equipo chileno acumular experiencia en
comunicaciones satelitales, sistemas de energía, Datos, control de actitud y otros
sub-sistemas críticos, lo que fortalece la posición de Chile en la ciencia
espacial.
El proyecto SUCHAI no solo apunta a generar
conocimiento científico, sino también a formar capital humano avanzado. Los
ingenieros Francisco Anguita y Carlos González, entre otros profesionales,
fueron parte de las piezas clave del equipo multidisciplinario que supervisó la construcción
y operación del nanosatélitedoc.ingenieros.cl. Gracias a esfuerzos como éste,
Chile puede “aprovechar las ventajas que existen hoy para ir al espacio, y crer
proyectos, para nuestra población y el mundo” uchile.cl. En efecto, los
resultados obtenidos (telemetría, fotografías de la Tierra, mediciones del
campo magnético, etc.) ya aportan datos útiles para la investigación, y sirven
de aprendizaje para los próximos satélites miniaturizados en desarrollouchile.cl
Infraestructura espacial y colaboraciones internacionales.
En la planificación de sus misiones, Chile se apoya
también en una sólida infraestructura de observatorios y estaciones terrestres.
Por ejemplo, la red ALMA (Atacama Large Millimeter/submillimeter Array), un
conjunto de 66 antenas instaladas en el norte de Chile, es hoy “el telescopio
más poderoso del mundo para estudiar el Universo en longitudes de onda
submilimétricas”eso.org. La imagen a continuación
ilustra un modelo 3D de una antena de ALMA, símbolo de la vanguardia
astronómica chilena.
Figura: Representación 3D de una antena de ALMA en Chileeso.org. Este observatorio, junto con otros como los radiotelescopios del NOIRLab de Estados Unidos o el futuro Telescopio Extremadamente Grande (ELT) de ESO, posiciona a Chile como un centro global de investigación espacial. En la práctica, las señales de los nanosatélites como SUCHAI son captadas y procesadas desde estaciones en Chile y alrededor del mundo, en colaboración con agencias internacionales. Esta colaboración refuerza la idea de que los proyectos de ciencia espacial chilenos operan en una escala global.
Un análisis comparativo del gasto estatal en
ciencia y tecnología refleja las diferencias en inversión, pero no
necesariamente en resultados.
País |
Gasto en I+D (% del PIB, 2023) |
Chile |
0,36 %uchile.cl |
Promedio
OCDE |
2,72 %uchile.cl |
Estados
Unidos (ej.) |
~3,4 % |
Corea
del Sur (ej.) |
~5,1 % |
Aunque países desarrollados destinan un porcentaje
mucho mayor de su PIB a I+D, Chile logra mantener un nivel de productividad
sorprendenteuchile.cl. Según datos de la OCDE, la
inversión promedio en investigación en los países más avanzados ronda el 2,72%
del PIBuchile.cl (más del doble que la chilena),
destacando ejemplos como EE.UU. o Corea del Sur con cifras superiores al 3%. La
tabla ilustra esta brecha: con solo 0,36% del PIB, Chile compite gracias a
eficiencia y talento local. Sin embargo, expertos coinciden en que aumentar
estos recursos impulsaría aún más iniciativas de clase mundialuchile.clciperchile.cl.
Más sobre esta temática: El avance de la tecnología
espacial en Chile y proyectos afines en Latinoamérica, como sigue en
aumento con nuevos lanzamientos y colaboraciones internacionales. Para
profundizar en otros desarrollos relevantes, puede leer nuestro artículo
Avances en nanosatélites latinoamericanos.
Desafíos y futuro.
El proyecto SUCHAI es solo el comienzo de una
estrategia más amplia. Las nuevas versiones de estos nanosatélites incorporan
instrumentación mejorada (por ejemplo, magnetómetros para medir el campo
magnético) y se planean misiones adicionales. Mientras tanto, el
éxito y la visibilidad del programa espacial universitario ha motivado
discusiones sobre la creación de una Agencia Espacial Chilena o el aumento de
financiamiento público para I+D. Como señala el decano Patricio Aceituno, esta
iniciativa demuestra que nuestras universidades pueden estar a la vanguardia
del desarrollo tecnológico si se les dan las oportunidades.
A futuro, Chile aspira a seguir participando en
misiones globales: desde satélites de observación terrestre para monitorear
desastres hasta constelaciones de comunicación en órbita baja. La comunidad
espacial nacional ha comenzado incluso proyectos empresariales de transporte de
carga al espacio, y está integrada en redes internacionales
de seguimiento satelital.
En conclusión, el caso del nanosatélite SUCHAI
ejemplifica cómo la ciencia y tecnología en Chile alcanza niveles
mundiales pese a restricciones presupuestarias. Con jóvenes talentos como
Francisco Anguita, Carlos González y muchos otros, nuestro país, también, apuesta por la
innovación aeroespacial. La experiencia demuestra que, con visión y
perseverancia, los proyectos chilenos son competitivos a escala
global uchile.cl. Este impulso no solo eleva el
prestigio nacional, sino que genera nuevos conocimientos y capacidades
tecnológicas que benefician a toda la sociedad hacia futuros proyectos de innovación, gestión espacial y tecnológica global.
Bibliografía: Universidad de Chile –
“SUCHAI I: hacia un programa espacial”uchile.cl y “El objetivo es posicionar a
Chile como un país que es capaz de realizar ciencia espacial de alto
nivel…”uchile.cl; Universidad de Chile – “Los países investigan…”
(datos inversión en I+D)uchile.cl; DocIngenieros.cl –
“Perspectivas de comunicaciones con CubeSats: Lecciones aprendidas del programa
SUCHAI”doc.ingenieros.cl; CIPER Chile – “Presupuesto de ciencia, tecnología e
innovación: miopía sin tratamiento”ciperchile.cl; NASA – Declaración del
administrador sobre presupuesto FY2023 (datos presupuestarios); Organismos
internacionales (OECD, UNESCO) y estudios especializados en ciencia espacial. Suchai. GDU.
Imágenes:
istockphoto-pixabay
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